EL SER NO ES EL ENTE 2.0

Mi compadre y su familia están en cuarentena, por disposiciones del gobierno debido a la presencia del covid 19; en compañía de sus mascotas, Chiquito y Scott ya tenían un mes en cuarentena y los perros estaban desesperados por salir. En una oportunidad mi compadre salió a la playa cercana a su casa y   llevó a sus mascotas quienes les raspaban la puerta de salida a la calle para que los sacaran del encierro ya que estaban acostumbradas a salir varias veces en la semana, en un descuido mientras conversaba con sus familiares quienes viven en frente del mar, los perros aprovechando que le aflojaron las correas. Salieron en veloz carrera hacia la playa e ingresaron al mar, luego los ve que estaban en el mar alejados de la playa, bien adentrados.  Llamó inmediatamente a su hijo mayor para que auxiliara a los perros, llegó e ingreso al mar junto a otros en tablas de surf,  los vio y se dirigió hacia ellos, un amigo surfista vio a Chiquito encima del papá Scott como si se tratara de un

Por decisión del Consejo Cantonal (gestión de concejales: Nicky Padovani, Arq. Quintero y Ernesto Echeverria) posteriormente con el apoyo generoso de exalcalde Patricio Páez Rosero en el año 1977 se alquiló ese local al señor Héctor Sánchez Frías en el edificio recién inaugurado ubicado en las calles Bolívar y 9 de octubre. Para que dé inicio a su emprendimiento. Su inauguración fue en 1.978 Colaboró en la decoración y ornato del Zambo el Arq. Alberto Santoro y el Departamento de obras públicas de la municipalidad que permitió y construyo escalinata de acceso en la calle Bolívar. Había una pequeña plataforma rectangular de unos ocho metros cuadrados que era para bailar ejecutándose la música disco de los años ochenta que fue un boom. El plato más pedido era la picada de pescado, que es el atún picado en cubos fritos acompañado de salsa, mayonesa y ají Tabasco. La música que sonaba era a través de un equipo de sonido Pioneer, parlantes traídos desde Panamá se usaban los case

Ha fallecido el popular dame esos cinco, el alma del barrio, la chispa del grupo, también conocido como lavaplatos, dame esos cinco lavaplatos decían, y aparecía la alegría, el infalible del brother, del primo, mi body, el mijo, mi perro, mi pez, ahora solo nos queda habla bien, pero de lejitos no más sin desinflado, no vaya ha ser que fuas te caiga el salivazo y cuarentena eterna sin saber leer ni escribir, pilas con habla bien, que tal vez debería cambiarse de apodo a cuenta bien porque somos cada vez menos y si no hay quien lleve la cuenta la ingratitud enterrará a vivos y muertos, que terrible lo de dame esos cinco lavaplatos ya nadie lo invocaba ya todo el mundo se guardaba se fue enfermando de pena pero el virus lo mató, no lo salvó ni el sobrenombre que lo ganó haciéndole al aseo de vajillas, ni bien terminaba de declararse chiro en un restaurante tras pegarse un almuerzo y es que con tanta lavada todo el mundo pensó que la bendita pandemia se podía llevar a cualquiera menos a é