Desde la orilla del río Esmeraldas por la calle roja adoquinada jardines hermosos a los costados voy cogido del brazo de gancho a celebrar mis sagradas nupcias entonan la marcha nupcial parararam parararam voy junto a la parca de la muerte la que con su tijera cualquier rato cortará el despliegue de mi existencia al final del callejón rojo está el casamentero la parca y yo somos novios está consumada la unión en las riberas del río Esmeraldas la calle del adoquín rojo la ceremonia con los excompañeros ¡viva la fiesta!