Se dice que Firindingo Salvatierra tenía familiares, los familiares eran una especie de pequeños diablillos, que después de hacer un pacto con el diablo, ellos se quedaban trabajando para el que pactaba con él, en este caso se decía que Firindingo Salvatierra lo había hecho para desarrollar su finca cercana al mar. Pasado el tiempo, después de que se sirvió de los diablillos y aumentó su fortuna, quiso deshacerse de ellos, se los llevó mar adentro metidos en unas pequeñas jaulas, estando allá los echó al agua, para que este acto sea efectivo, no tenía que mirar hacia atrás mientras regresaba a tierra sin ellos. Estando en alta mar los diablillos gritaban en unísono Firindingo, Firindingo no nos dejes, mientras se alejaba, entonces curiosamente miró hacia atrás, en ese momento miles de diablillos se lo llevaron sin retorno mar adentro.