Reunidos algunos amigos alrededor de una mesa tomando una botella de whisky conversaban y discutían la nacionalidad del poeta Gustavo Adolfo Béquer, el que puso la botella de whisky decía que Béquer era nacido en la República Dominicana, mientras la mayoría del grupo decía que el poeta era nacido en España, quienes estaban en lo cierto. Pero el que puso la botella, la agarró de la mesa y la puso entre sus brazos y les preguntó a los del grupo que si Béquer no era de República Dominicana él se llevaba la botella. Inmediatamente al unísono todos gritaron que sí, efectivamente Gustavo Adolfo Béquer si era nacido en la República Dominicana, que tenía toda la razón; luego éste puso la botella en la mesa, continuaron bebiendo y dialogando.